Los insectos se encuentran en la base de muchas redes tróficas y necesitan poca superficie para desarrollarse, lo que los convierte en un ingrediente atractivo en la búsqueda de piensos más sostenibles para los peces.
En un nuevo estudio sobre el uso de larvas de mosca soldado negra como alimento acuícola alternativo, el instituto de investigación noruego Nofima investigó los efectos del stickwater -un ingrediente soluble en agua y rico en nutrientes producido durante el procesado de insectos- en el crecimiento de crías de salmón
Los investigadores de Nofima produjeron piensos de prueba en los que añadieron un 10% de harina de insectos y diferentes niveles de agua pegajosa procedente de larvas de mosca soldado negra. Los piensos de prueba se administraron a crías de salmón mantenidas en tanques de prueba en la estación de investigación Sunndalsøra de Nofima, y se compararon las tasas de crecimiento de los salmones bajo los regímenes de prueba y de control.
Los ensayos demostraron que los parr de salmón crecían igual de bien y tenían una digestión igual de buena cuando su dieta contenía stickwater de insectos, en comparación con los peces que seguían la dieta de control. Con un 10 por ciento de harina de insectos en el pienso, los peces también crecieron igual de bien que los que recibieron el pienso de control.
"El ensayo demuestra que no hay ningún problema en que el salmón tenga al menos un 10 por ciento de harina de insectos en su alimentación. Basándonos en los efectos positivos de la fracción stickwater de la harina de pescado, no podemos descartar que esta fracción de insectos hubiera tenido un efecto positivo en otras condiciones. En cualquier caso, se trata de una importante corriente secundaria que hay que salvaguardar para la utilización óptima de los insectos como alimento para peces", afirma Andre Sture Bogevik, de Nofima.
El proyecto también investigó la fracción de agua pegajosa de la harina de pescado
El proyecto también investigó los efectos de los distintos piensos en el nivel de manganeso del salmón. La UE tiene valores umbral para el contenido de manganeso en los piensos acabados para peces de piscifactoría, y los insectos contienen naturalmente altos niveles de este elemento. El ensayo demostró que los peces excretan el mineral y no absorben más en el organismo que si la comida no contuviera niveles elevados de manganeso. El mineral tampoco provocó deformidades ni tuvo un impacto negativo en el crecimiento.
"Estamos encantados de observar resultados alineados con la investigación interna que hemos llevado a cabo durante los últimos años en Innovafeed. Los resultados de crecimiento allanan el camino para el uso generalizado de proteínas de insectos en la industria del salmón, como ingrediente sostenible, trazable y de alto rendimiento", declaró Elin Kvamme, directora de aqua en Innovafeed, el productor de las larvas de mosca soldado negra utilizadas en el estudio.