Los piscicultores aún no han determinado la causa de la muerte de los peces, aunque varios expertos han planteado diversas explicaciones, como el afloramiento de las aguas.
El problema es que los peces han muerto
Adams Gina, piscicultor de Mulukoba Beach, en Budalangi, condado de Busia, afirma que ha sufrido pérdidas por valor de 5,6 millones de chelines (unos 44.000 dólares) tras la muerte de sus peces.
"Tengo cinco jaulas y la muerte de los peces ha sido un desastre
"Tengo cinco jaulas, y cuatro de ellas se han visto afectadas. En una de ellas caben 8.000 peces", explica el piscicultor, que cuando ocurrió el incidente sólo había cosechado en una jaula. Esperaba cosechar en las cuatro jaulas afectadas durante noviembre y diciembre, cuando la demanda de pescado es alta.
Este suceso no es nuevo en la historia de la acuicultura española
No es la primera mortandad masiva de peces que se produce en el lago Victoria. Miles de peces murieron en 2022 y 2023 cuando algunas partes del lago se vieron gravemente afectadas, incluida la playa de Rudacho.
"En la zona que nos asignó el condado, se había realizado un estudio de viabilidad y se descubrió que el afloramiento no puede producirse fácilmente", afirma Gina.
Yufnalis Okubo es otro piscicultor que perdió peces en sus tres jaulas. Tenía 15.000 alevines en cada una de las dos jaulas de 5 por 10 metros y, en otra de 5 por 5, 8.000 alevines. En total tenía 38.000 peces de unos seis meses de edad
"Es una gran pérdida. Los peces se iban a recoger en diciembre, cuando normalmente tenemos una gran demanda. Un kilo de pescado vale 350 chelines (2,7 dólares), y si hubiera crecido a plena capacidad, habría cosechado 38 toneladas, que habrían dado un bruto de 13,8 millones de chelines (106.977 dólares), a pleno crecimiento. Pero, como no todas las poblaciones crecen al mismo nivel, siempre obtenemos alrededor de dos tercios o el 50%, teniendo en cuenta también la mortalidad. La estimación bruta habría sido de unos 7 millones de chelines (54.264 dólares)", afirma
Okubo cree que la causa de la mortandad masiva es un fenómeno natural llamado afloramiento, que se produce anualmente pero con fuerzas y gravedad diferentes.
"El año pasado la playa de Mulukoba no se vio afectada porque el afloramiento no tuvo mucha fuerza y no fue tan grave como este año. Podemos hacerlo mejor con el apoyo frecuente de la acuicultura", afirma Okubo.
Joakim Omollo Oijambo, presidente de Mulukoba Beach, que se encuentra en Puerto Victoria, afirma que la muerte masiva de peces comenzó a producirse hace unos días y que todas las jaulas se han visto afectadas.
"Han muerto todos. Hemos perdido casi 250 toneladas", revela.
Edward Obuyu, otro piscicultor que sufrió pérdidas por la muerte de sus peces, hizo un llamamiento al Gobierno del condado de Busia para que intervenga.
El Secretario del Gabinete para Minería, Economía Azul y Asuntos Marítimos, Ali Hassan Joho, celebró una rueda de prensa conjunta con el Dr. Paul Otuoma, Gobernador del Condado de Busia, y anunció que han compensado a los acuicultores afectados dándoles 7 millones de chelines (54.264 dólares) para facilitar la compra de alevines, además de otros 2,5 millones de chelines (19.380 dólares) para comprar piensos para peces.