Será la primera camaronera a escala industrial del Reino Unido RAS, con una unidad de producción modular inicial de 250 toneladas, e incluirá una incubadora y una zona adicional de procesado y envasado. La primera cosecha está prevista para el primer trimestre de 2026. En última instancia, la planta podrá producir más de 2.500 toneladas al año a medida que aumente la demanda.
La semana pasada, el gobierno británico concedió a la empresa una subvención de 5 millones de libras en el marco del UK Seafood Fund: infrastructure Scheme y la empresa se encuentra actualmente en una ronda de financiación. La empresa espera iniciar la construcción en el primer trimestre de 2024.
"Estamos sentando las bases para el futuro de una industria camaronera británica sostenible"
afirma la empresa en su página web.
FloGro utiliza un sistema de acuicultura de recirculación en circuito cerrado, alimentado por energía renovable y que cuenta con una innovadora solución de tratamiento del agua para reciclar el agua, el calor, la sal y los flujos residuales. El sistema puede instalarse en cualquier lugar del interior para producir gambas de agua dulce y salada de alta calidad en el punto de consumo, 24 horas desde la cosecha hasta el plato
Ralph Maxwell, director general de la empresa, la fundó en 2011 para aprovechar el creciente apetito por los productos del mar británicos y obtuvo una subvención de Innovate UK para realizar pruebas de viabilidad de un sistema RAS de ciclo cerrado para la producción de gambas
Durante cinco años, FloGro operó una granja de investigación y desarrollo en Lincolnshire, desarrollando experiencia en RAS e importando larvas del extranjero.
"Durante este período, identificamos la cría óptima de camarones a través de una cuidadosa aplicación e integración de la cría de larvas con recetas específicas de piensos de crecimiento, junto con el desarrollo de una sólida operación RAS y protocolos de bioseguridad", dice la compañía en su página web.
Los pequeños volúmenes producidos por la empresa en la granja de prueba se enviaron a restaurantes y minoristas de alimentos de primera calidad, que elogiaron ampliamente el producto. Además, durante el cierre de Covid-19, la empresa se hizo con un público directamente consumidor que estaba dispuesto a pagar una prima por kilogramo por langostinos frescos cultivados localmente y entregados en su casa en las 24 horas siguientes a la cosecha.
Tras cinco años de I+D, la empresa afirma que ya está preparada para lanzarse a gran escala. FloGro afirma que ha acumulado una gran cantidad de conocimientos sobre alimentación, comportamiento animal, entorno de cultivo óptimo y condiciones para maximizar el rendimiento y la rentabilidad. Los ingredientes esenciales son la construcción de la planta de incubación para dar una calidad constante y la certeza del suministro de larvas y maximizar el uso de energía sostenible para promover las credenciales ecológicas de lo que vamos a producir y como exigen nuestros clientes.