La IFFO explicó en Stirling que los aceites de pescado pueden contener hasta un tercio de omega-3, mientras que la mayoría de los aceites crudos para productos omega-3 proceden de pequeños peces pelágicos como anchoas y sardinas, y cada vez más de subproductos de la industria del marisco. En 2022, el 54% de la producción mundial de aceite de pescado procedía de subproductos de pescado. Hasta el 25 por ciento de la producción mundial de EPA y DHA [ácido eicosapentaenoico y ácido docosahexaenoico, dos de los omega-3 más buscados en la acuicultura] procede de Perú.
Según la IFFO, la producción mundial de aceite de pescado se ha mantenido notablemente estable durante la última década, en torno a 1,2 millones de toneladas métricas anuales de media, aunque este año parece probable que se produzca un desplome de la oferta mundial.
La producción mundial de aceite de pescado se ha mantenido estable durante la última década, en torno a 1,2 millones de toneladas métricas anuales de media
Los recientes "eventos de El Niño explican la caída de la producción de EPA y DHA en 2022", explicó Enrico Bachis, director de estudios de mercado de IFFO, añadiendo que además de los eventos de El Niño, el contraevento de La Niña reduce en gran medida el contenido global de aceite en el pescado.
Tres sectores están impulsando esta demanda: la acuicultura (con más del 70 por ciento del uso de aceite de pescado), el farmacéutico y el de alimentos para mascotas.
Las necesidades de aceite de pescado en el mercado mundial son muy elevadas
Requerimientos y beneficios de los omega-3
Está bien establecido que el EPA y el DHA tienen una amplia gama de efectos tanto en los peces como en la fisiología humana: estructura de la membrana celular, regulación de la inflamación y resistencia a las enfermedades.
En cuanto a las diferentes especies, el director técnico de IFFO, Brett Glencross, declaró que es difícil agrupar las especies de peces marinos y cómo responden al EPA y al DHA. Los requisitos cambian con el tamaño de los peces: se necesitan requisitos más altos a una edad temprana. Sólo se dispone de unos pocos modelos cuantitativos sobre la maximización de la eficiencia de absorción y retención para unas pocas especies, y es necesario seguir trabajando en esta área para desarrollar estrategias de gestión más óptimas para la optimización de omega-3.
Bente Ruyter, de NOFIMA, informó sobre cómo los omega-3 influyen en el crecimiento, la calidad y la salud del salmón del Atlántico. Informó de que es necesaria una ingesta de entre el 6,5 y el 10 por ciento de EPA y DHA en la grasa de los piensos suministrados a los peces en jaulas marinas para que el crecimiento y la calidad se vean afectados positivamente. Mientras que una ingesta del 3 al 10 por ciento es necesaria para impactar positivamente en la salud, dependiendo del tejido, la etapa de la vida y el grado de estrés y el medio ambiente.
En cuanto a las gambas, no almacenan lípidos como los peces y no se consideran una fuente útil para la ingesta de omega-3 por parte de los humanos, pero siguen necesitando omega-3 en sus dietas.
"Las gambas no toleran niveles elevados de lípidos. La digestión de los lípidos se ve afectada por los niveles de lípidos y los perfiles de ácidos grasos", destacó el Dr. Brett Glencross. Sin embargo, añadió que las gambas necesitan ácidos grasos omega-3 en la dieta: las investigaciones han demostrado que la ausencia de lípidos y omega-3 es terminal. Una combinación de PUFA de cadena corta y de cadena larga es mejor que cualquiera de los dos por separado, y este efecto es evidente en múltiples especies de gambas.
Nuevas fuentes de omega-3
Pasando a los recursos novedosos de omega-3, Mónica Betancor, profesora asociada del Instituto de Acuicultura, informó de que cada uno de ellos presenta una serie de beneficios y riesgos:
Los omega-3 de cadena corta y de cadena larga son mejores que los omega-3 de cadena larga
- La cría vertical en interiores de microalgas (que son productoras primarias de EPA y DHA) puede utilizarse para alimentar a los peces tanto en fase larvaria como adulta. Sin embargo, el uso de biomasa de microalgas directamente en los piensos limita la inclusión, debido a problemas de digestibilidad, y el precio ha sido un obstáculo, especialmente para el aceite de algas.
- Se han producido cultivos transgénicos que incluyen genes de microalgas y ahora son capaces de producir su propio EPA y DHA. Pero la legislación y la desregulación en algunos países han sido limitantes y la aceptación pública es baja en la actualidad (en algunos mercados)